por qué una doula
FERTILIAD Y EMBARAZO CONSCIENTE
La maternidad empieza con la idea de recibir a un hijo. Una doula acompaña tu preconcepción, ayudándote a preparar cuerpo y alma para atravesar un portal de vida.
El rol de una doula no se limita al acompañamiento en el parto. Su labor abarca los distintos procesos vitales que marcan transiciones profundas en la vida de una mujer: la menarquia, la etapa de preconcepción, el embarazo, el nacimiento, el puerperio e incluso el final de la vida. Cada uno de estos hitos representa una transformación en la que una versión anterior se despide y emerge una nueva manera de habitar y mirar el mundo.
Fertilidad y Preconcepción
El estrés puede retrasar la concepción hasta en un 29%.
(Journal of Human Reproduction).
Una doula ayuda a reducir ansiedad y a crear calma en la búsqueda. Acompaña con hábitos (alimentación, sexualidad, ritos, sueño), autocuidado y conexión con el ciclo, preparando cuerpo y alma para recibir la vida.
Embarazo y Parto
39% menos cesáreas
15% menos uso de analgésicos
25% menos duración del parto
mayor satisfacción materna y menor índice de depresión postparto.
(Cochrane Review, 2017)
El apoyo continuo de una doula aumenta la seguridad y conexión de la madre, mejorando bienestar emocional (DONA International).
Una doula no reemplaza al equipo médico: lo complementa con presencia, confianza y cuidado constante.
Rosario Castaño,
doula de fertilidad y embarazo, diseñadora y fotógrafa.
“Ofrezco mi compañía, presencia y escucha atenta. La confidencialidad de un espacio que guardará cada palabra, mis mejores intenciones. Estudié y también busqué en libros, en la naturaleza y en la voz de otras mujeres que anduvieron el camino antes que nosotras. Traigo recetas de fortaleza, masajes vivos, espacios de encuentro”.
Soy Doula, conozco de procesos naturales para cuidar el cuerpo y nutrir el alma calmando las emociones. La palabra «doula» procede del griego antiguo δούλη que significaba «esclava» o «sirvienta».
Estoy al servicio.
Cada ciclo comienza con varios folículos en desarrollo: múltiples potencialidades de vida. Solo uno, a veces dos, alcanza la madurez para transformarse en óvulo fértil.
Este proceso dura cerca de 100 días, por eso cualquier cambio en la alimentación, el descanso, el movimiento o la gestión emocional requiere al menos tres meses para evidenciarse en la calidad de la fertilidad. Prepararse conscientemente es honrar ese tiempo y también el legado que nos conecta con quienes vinieron antes.
Exploración y trabajo (con ejercicios) en las 4 esferas de fertilidad:
CUERPO, ESPIRITU, MENTE y EMOCIÓN.
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